Después de una catarata de amenazas , la defensora oficial, Martínez Córdoba, debió renunciar por los incesantes aprietes recibidos a través de las redes sociales cuando sus datos personales fueron publicados por esa vía. Mientras que Villate recibió amenazas telefónicas y pintadas en la puerta de su casa.
“Ante hechos intimidatorios dirigidos contra el magistrado del Ministerio Público Fiscal, Adolfo Villatte, su hogar y su familia, y amenazas similares que sufriera días atrás la Dra. María Cristina Martínez Córdoba, la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional se solidariza con ellos y repudia estos actos que pretenden condicionar el normal desempeño de funciones constitucionales.", dice el comunicado
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